El primer día que llegamos , lo dedicamos a pasear por las calles de Mendoza, a ver la vuelta ciclista a Mendoza ( ¡ qué diferencia !), y a orientarnos un poco. Al día siguiente cojimos un omnibús para ir hasta Puente de Inca, cerca de la frontera de Chile, para poder contemplar unas vistas excepcionales de la montaña más alta del planeta , después del Himalaya. El Aconcagua. Estuvimos caminando por los alrededores y viendo lo que el tiempo nos permitió. Para finalizar, estuvimos al día siguiente en Maipú, que es una localidad a 15 kms de aquí, donde se concentran una gran variedad de bodegas vinícolas. Alquilamos unas bicis y además de hacer algo de ejercicio, hicimos un curso acelerado de Catas de Vinos Argentinos. Como siempre la escupidera acabó vacía.
Aquí estamos después de una pequeña caminata, en el mirador del Aconcagua. Como habreis imaginado, la cima está detrás de nosotros, y también detrás de la nube. Por más que estuvimos soplando y soplando, no se apartó así que decidimos que tendremos que volver para verlo más de cerca.
Esto es un puente natural que utilizaban los incas para comunicarse desde Chile hacia Argentina o viceversa. Al ser todo terreno volcánico, hay manantiales de aguas sulfurosas que dejan la roca del color que veis, amarillo, ocre, naranja. No huele mal pero la imagen es extrañísima.
Por la noche nos fuimos a celebrar el cumpleaños de nuestra compañera de viaje, Oli, y fuimos a un restaurante que nos recomendaron desde el albergue. Nos pedimos... adivinarlo pero que lo de la foto, que sepais que no es una tarta de chocolate, y otra pista, es de vaca. Por lo menos medía 15 cms de alto. Era un cubo.
Hoy queríamos terminar la jornada visitando algunas bodegas de la zona. Hemos estado en el museo del vino más grande de Sudamérica, viendo como elaboran el vino por aquí, así como degustándolo, probando licores, chocolates y pequeñas delicatessen que nos han ido ofreciendo por la ruta " bikes and Wines " que hemos hecho. Con esta foto , brindamos con todos nuestros asiduos lectores, a vuestra salud. Chin-chin.
En el apartado dedicatorias, ya que vamos leyendo en la prensa que Alonso va calentando motores para el arranque del premio de Fórmula Uno, queríamos dedicar el día a sus más fieles seguidores, para que se den prisa en sacarse el carnet, a ver si lo pueden coger.

Adivina, adivinanza ¿ quién es quién ?
